La parálisis facial periférica supone, para las personas que la sufren, un suceso que provoca un padecimiento psicológico y social. Además, cuando su resolución no es completa, puede alterar la capacidad funcional y disminuir la calidad de vida de los afectados. Existen diferentes factores que pueden influir en la afectación psicológica, la capacidad funcional y la calidad de vida de la persona afectada de parálisis facial periférica, pero se ha observado una gran discrepancia en cuanto a la relevancia de estos factores. Por este motivo, los autores de este trabajo se propusieron analizar algunos factores que pueden influir en la afectación psicológica, la capacidad funcional y la calidad de vida de las personas que han sufrido una parálisis facial periférica no resuelta de manera completa
Para ello, realizaron un estudio transversal sobre una cohorte retrospectiva de 31 pacientes que habían sufrido una parálisis facial periférica, cuya resolución no fue completa. Los criterios de inclusión fueron los siguientes: mayores de 18 años, tiempo mínimo de evolución de 6 meses desde la lesión, resolución incompleta de la parálisis facial periférica y colaboración en la realización de los cuestionarios. Los factores analizados fueron los siguientes: severidad (medida mediante la escala Sunnybrook Facial Grading System), edad, sexo, lateralidad, etiología (quirúrgica o no quirúrgica), grado de lesión inicial del nervio (establecido mediante electroneurografía), tiempo de evolución, estado civil y ocupación laboral. Las escalas y cuestionarios utilizados fueron la Escala de Ansiedad y Depresión Hospitalaria, el Índice de Discapacidad Facial y la Facial Clinimetric Evaluation.
La muestra fue de 31 pacientes, con una media de edad de 51 años, la mayoría mujeres (74%), con una afectación derecha en 19 de ellos. La mayoría de parálisis faciales fueron de causa no quirúrgica (17 por parálisis de Bell, 4 por herpes zóster y 2 por otitis); 27 de los participantes tenían pareja y el resto de ellos no la tenían; 12 pacientes tenían profesiones de cara al público, no así en el resto de participantes. En cuanto a la severidad, la media en la escala Sunnybrook Facial Grading System fue de 67. El grado de lesión inicial del nervio medido por electroneurografía fue del 70%. El factor más relevante fue la severidad, con correlaciones estadísticamente significativas con la Facial Clinimetric Evaluation Scale total, la Facial Clinimetric Evaluation Scale social, el Índice de Discapacidad Facial física y el Índice de Discapacidad Facial total. En cuanto a la ocupación laboral, trabajar de cara al público se asoció a una peor calidad de vida, con diferencias estadísticamente significativas en la Facial Clinimetric Evaluation Scale total.
Ante estos resultados, los autores concluyen que la severidad de la parálisis facial periférica tiene una correlación directa con la discapacidad y la calidad de vida, de manera que a mayor severidad, se observa una mayor discapacidad y una peor calidad de vida. El estado civil se asocia a la discapacidad, y el tipo de trabajo a la calidad de vida de los pacientes con parálisis facial periférica.