Marta Jordán Domingo
Hace dos décadas ningún médico hubiera respondido en un examen que la úlcera gastroduodenal podía tener una etiología infecciosa. Barry Marshall (biopatólogo) y Robin Warren (gastroenterólogo) descubrieron en 1982 un bacilo gramnegativo, Helicobacter pylori (HP), que se adquiría en la infancia y que puede causar gastritis crónica (GC) y úlcera gástrica (UG) y asociarse a linfoma de células B de la zona marginal de tejido linfoide o linfoma MALT. Un 10-20% de los infectados por HP desarrolla una UG y un 1% presentará complicaciones como hemorragia o perforación. La prevalencia de la infección varía; en España, se sitúa en el 53-60,3% de la población adulta.