Esta ha sido la principal conclusión del estudio Cost-consequence analyisis of extended loading dose of anti-VEGF treatment in diabetic macular edema patients, llevado a cabo por el oftalmólogo y profesor José Ruiz Moreno y presentado en el IV Simposio READYT "Retina: Avances en el diagnóstico y tratamiento", organizado por Allergan.
Este año el encuentro ha estado centrado concretamente en el análisis y mejora de los resultados en salud en estas enfermedades: “En cualquier actividad debemos siempre analizar y medir lo que estamos haciendo, ya que es la única manera de poder conocer nuestros resultados y por lo tanto poder mejorar o corregir lo que no estemos haciendo bien. Las enfermedades de la retina son responsables de 3 de las 4 causas principales de ceguera legal; por lo tanto, tenemos una gran responsabilidad y debemos conseguir una actividad clínica que las evite. Unos buenos resultados siempre implican que el paciente sea el centro de nuestra actividad diaria y por lo tanto tenemos que buscar la mejor relación médico- paciente, infundiendo confianza en el paciente y optimizando nuestros resultados”, afirma el profesor José M§ Ruiz Moreno, Jefe de Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Puerta de Hierro- Majadahonda, Catedrático de Oftalmología de la Universidad Castilla La Mancha (UCLM) y Director Médico Vissum Corporación.
Cambio precoz
Al hilo de la medición de resultados en salud - el propósito principal del encuentro -, también se ha presentado un estudio titulado Cost-consequence analyisis of extended loading dose of anti-VEGF treatment in diabetic macular edema patients, sobre los costes asociados al cambio precoz de tratamiento, cuando este fracasa, frente al cambio tardío. El análisis, llevado a cabo por el profesor Ruiz Moreno, analiza las diferencias en el número de inyecciones intravítreas en el edema macular diabético cuando no hay respuesta a la terapia anti-factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF) ya que, en ocasiones, la sustitución terapéutica se alarga hasta las seis inyecciones. El objetivo, por tanto, es ofrecer más información y evidencia al oftalmólogo a la hora de decidir el cambio de terapia. No solo redunda en el beneficio del paciente, sino que además se reducen los costes sanitarios y se favorece así la optimización de recursos en el sistema, según el prof. Ruiz Moreno.
Actualmente casi la mitad de los pacientes con edema macular diabético no responden a la terapia anti- VEGF después de tres inyecciones. Por ello, el reto es mejorar los predictores de respuesta terapéutica en estos pacientes y acortar el cambio a corticoides: “Lo ideal sería poder decidir en el momento del diagnóstico del edema macular diabético cuál es la terapia idónea y conocer cuál es el paciente que responderá o no a las inyecciones de anti-VEGF. Evitaríamos tener que hacer el cambio después de tres inyecciones en los que no responden, cerca del 45-50%, sin duda, una cifra considerable. Directamente no haríamos inyecciones de anti-VEGF en estos casos mejorando la respuesta del paciente, causándole menos “agresión terapéutica” y optimizando los recursos”, señala el profesor.