Ayer tomó posesión de su cargo la nueva conselleira de Sanidade de Galicia, Rocío Mosquera Álvarez, que sustituye a Pilar Farjas, recién nombrada secretaria general del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Mosquera viene avalada por una amplia experiencia en gestión sanitaria en los ámbitos público y privado. Es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Santiago de Compostela y especialista en Cirugía General y del Aparato Digestivo. Su promoción dentro de la administración sanitaria se inició de la mano de Manuel Fraga: de directora de Atención Primaria de Salud del Área Sanitaria de Santiago pasó a jefa del Servicio de Inspección Sanitaria de la Secretaría General de la Consellería (1991-1994), subdirectora general de Atención Especializada del Sergas (1994-1998), asesora de la Dirección General de Salud Pública (1991-2001) y era gerente del Sergas desde 2009.
Su excelente perfil técnico se ha visto oscurecido en los últimos años al haber sido acusada de supuestos «favoritismos» hacia su familia. Asimismo, han sido objeto de polémica medidas como la financiación público-privada del nuevo Hospital de Vigo, su decisión de elevar a 100 camas el mínimo para que sea obligatorio que un hospital tenga servicio propio de farmacia, exigir 183 días de empadronamiento en un municipio para tener derecho a atención sanitaria completa y su intención, luego retractada, de eliminar la tarjeta sanitaria a los parados de larga duración.