La fisiología de las mujeres y de los hombres no reacciona de la misma manera ante las enfermedades ni ante los tratamientos. Un nuevo ejemplo lo encontramos en un reciente estudio multicéntrico liderado por el Grupo de investigación en Desgaste Muscular y Caquexia en Enfermedades Crónicas Respiratorias y Cáncer de Pulmón del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM-Hospital del Mar), que publica la revista Biomedicines. En él se destaca que el sexo del paciente afectado por bronquiectasia, una enfermedad pulmonar, es determinante a la hora de establecer su gravedad, hecho que obliga a tener en cuenta este descubrimiento a la hora de hacer su seguimiento.
El trabajo ha analizado los datos de 2.121 pacientes, procedentes del Registro Informatizado Español de Pacientes con Bronquiectasia (RIBRON), de los cuales dos de cada tres (1.368) eran mujeres. Se tuvo en cuenta diversos parámetros clínicos a la hora de clasificar su nivel de gravedad en tres escalas diferentes, que incluyen parámetros clínicos como la función pulmonar, los esputos, el estado nutricional, la colonización por gérmenes más agresivos o la extensión radiológica de las bronquiectasias. Teniendo en cuenta estos factores, las mujeres presentaban unos índices de gravedad claramente inferiores a los de los hombres en las tres escalas clínicas utilizadas en el estudio. En este sentido, hay que destacar que en el grupo de los hombres había más fumadores. También que se vieron importantes diferencias en los parámetros nutricionales entre hombres y mujeres, con un índice de masa corporal más elevado en los hombres respecto a las mujeres.
“Estos resultados nos indican que, en el caso de pacientes con bronquiectasia, hay que tener en cuenta su género a la hora de plantear el seguimiento de la enfermedad”, apunta Esther Barreiro, autora principal del estudio e investigadora del IMIM y del CIBER de Enfermedades Respiratorias (CIBERES). A la vez, destaca que el estudio muestra que diversos parámetros nutricionales, así como biomarcadores de inflamación tiene que ser estudiados como potenciales predictores de la evolución de los pacientes.