En el encuentro, moderado por el periodista especializado en salud de El País y vicepresidente de ANIS, Emilio de Benito, el Dr. López Medrano explicó que «la vitamina D es una hormona, no una vitamina», y puntualizó que las vitaminas son sustancias que hay que tomar del exterior porque el organismo no es capaz de sintetizarlas y la vitamina D sí es sintetizada gracias a los rayos solares, fuente principal.
«La vitamina D –apuntó el Dr. López Medrano– engloba a 4 o 5 moléculas diferentes. Lo que se sintetiza en la piel por la acción de los rayos del sol y que se encuentra en los alimentos es colecalciferol. Hay una forma intermedia que se sintetiza en el hígado, que responde a las moléculas calcidiol o calcifediol, y que puede llevar a la confusión». «Para sintetizarla –prosiguió– es fundamental la exposición solar y en toda la zona del hemisferio norte que queda por encima del paralelo 35, entre noviembre y febrero, no hay prácticamente posibilidad de sintetizar la vitamina D, es más difícil, y para ello son necesarios suplementos de forma fisiológica a lo largo de esos meses».
Los suplementos de vitamina D
España es de los pocos países del mundo en los que se comercializan tanto colecalciferol como la forma intermedia calcidiol, que han generado algunas controversias y confusión en los medios porque no se pueden utilizar como equivalentes. En las guías internacionales hablan de colecalciferol, mientras que el calcidiol produce un aumento más rápido de los niveles en sangre.
Dos publicaciones –una del año 2013 del Sistema Español de Farmacovigilancia y otra de 2019 de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios– se refieren a la intoxicación de la vitamina D. En este sentido, el Dr. López Medrano apuntó que hay que ser muy cautos en la interpretación de la información y revisar la letra pequeña que detalla de qué molécula en concreto se está hablando. Los casos descritos por el momento han sido con la forma intermedia calcidiol. También es fundamental tener muy en cuenta otra letra pequeña sobre dosis y cifras, para evitar confusiones.
El periodista Xavi Granda recalcó que aquí es muy importante el papel de los medios e informar adecuadamente sobre los estudios que se publican en las revistas científicas.
Pacientes con niveles bajos de vitamina D
Sobre el tratamiento de la hipovitaminosis y la utilización de suplementos es fundamental conocer los niveles de vitamina D, haciendo referencia a diversos estudios. El experto apuntó que «confundimos tratamiento de la hipovitaminosis con suplementación. En pacientes ancianos con niveles basales muy bajos de vitamina D (3, 5, 10 ng/mL), y sujetos que ya parten de niveles normales se les de más suplementación. No tiene nada que ver el tratamiento de la hipovitaminosis que dar suplementos a las personas que ya parten de niveles adecuados de vitamina D».
Por otra parte, indicó que los niveles bajos de vitamina D aumentan el riesgo de infecciones y se suelen asociar a otras patologías. «La vitamina D aumenta antibióticos naturales (catelicidinas) frente a la incidencia de una infección», añadió.
Hay estudios que indican que las personas con niveles bajos de vitamina D tienen con frecuencia infección y más posibilidades de infección grave. También se asocian a personas con mayor edad, con patología pulmonar previa, hipertensión y diabetes, entre otras.
«Las personas ingresadas por Covid-19 con niveles bajos de vitamina D tienen un mayor riesgo de gravedad que aquellas que tienen niveles altos de esta vitamina», explicó.
Pacientes con osteoporosis
La tesorera de la Asociación Española con la Osteoporosis y la Artrosis (AECOSAR), Carmen Sánchez, habló en su intervención sobre la vitamina D en pacientes con osteoporosis. «Muchos pacientes –dijo– tienen en su tratamiento suplementación de vitamina D. Supone una pastilla más y no siempre se conoce su importancia. Por eso, los médicos deben hacer un esfuerzo para explicar la duración y posología del tratamiento de los pacientes».
Resulta fundamental la coordinación de los médicos especializados y los de atención primaria, entendiendo que un incumplimiento terapéutico puede incidir en la salud de los pacientes y suponer un importante gasto económico.
«En general hay mucho desconocimiento entre los pacientes sobre la vitamina D», señaló Carmen Sánchez, que concluyó: «Es necesario involucrar al paciente e informarle sobre ello».
Tanto la representante de AECOSAR como el experto Dr. López Medrano coincidieron en la importancia de reclamar que a los médicos de atención primaria les permitan incluir en sus análisis los niveles de vitamina D, aun sabiendo que en España existen grandes déficits en general y que la suplementación puede ayudar.