Este curso aborda específicamente el manejo de fármacos cuya aplicación y tolerancia son imprescindibles para alcanzar éxitos terapéuticos en patologías tan importantes como diversos tipos de cáncer, enfermedades reumatológicas y neurológicas, entre otras. Martí Guadaño explica que ocupan un papel destacado en el curso el enfoque de los tratamientos para diferentes quimioterápicos (platinos, taxanos) y anticuerpos monoclonales (rituximab, antiTNFalpha). «El tratamiento de desensibilización permite a determinados pacientes que presenten reacciones de hipersensibilidad a determinados fármacos de primera elección puedan llegar a tolerarlos», añade el presidente de la Fundación Martí Fabra.
El curso cuenta con la presencia de Mariana Castells, directora del Programa de Desensibilización del Brigham and Womens Hospital de Boston. En su opinión, el efecto de la desensibilización continúa mientras la medicación se mantenga, como puede ocurrir en aquellos pacientes a los que hay que desensibilizar con ácido acetilsalicílico para tratar determinadas enfermedades vasculares y que pueden seguir el tratamiento hasta treinta años.