El evento ha girado en torno a tres mesas de debate donde se ha puesto en valor las estrategias de humanización de la sanidad madrileña y las iniciativas formativas que la Escuela Madrileña de Salud ha puesto al alcance de los pacientes para fomentar su participación y formación.
El Clínico San Carlos está desarrollando varias líneas estratégicas desde junio de 2015. Además, para potenciar esta área, el centro ha creado recientemente un área de personalización de la atención sociosanitaria y RSC, que está coordinada por Julio Zarco.
En el encuentro se han analizado tres modelos de buenas prácticas de personalización puestas en marcha en el Clínico San Carlos. María José Devesa, de la Unidad de Hepatología, ha explicado como “la formación e información al paciente y su ponderación como pieza clave en el proceso asistencial de la hepatitis genera una mayor fidelización a los tratamientos, imprescindible para un mejor resultado terapéutico.
Por su parte Mercedes Cañas, enfermera especializada en enfermedad inflamatoria intestinal (EII), trata sobre la importancia de cubrir las necesidades tanto físicas como emocionales, sociales y laborales de estos pacientes. “Ofrecemos información a pacientes y familiares que puedan comprender y utilizar para poder tomar decisiones de manera libre e informada, además de ayudarles a manejar su propia enfermedad, evitando complicaciones y mejorando su calidad de vida”, añade.
Desde el Servicio de Farmacia, Alejandro Santiago habló de la importancia de los programas de soporte a pacientes, cuyo objetivo es proporcionar educación al enfermo, para apoyar el comportamiento de autogestión, incluyendo actividades de asesoramiento sobre medicación, entrenamiento en el uso, soporte y recordatorios en la toma de medicamentos.
10 líneas estratégicas
El área de Personalización de la Asistencia Sanitaria y Responsabilidad Social Corporativa del Clínico integra la atención al paciente, humanización, RSC, la labor sociosanitaria de trabajo social, voluntarios y asociaciones de pacientes.
Los objetivos de esta macro área son los de convertir el servicio de atención al paciente en un elemento proactivo del hospital, para que participe en el diseño de nuevos procedimientos que garanticen la humanización y la participación activa de pacientes y familiares en la resolución de los problemas de salud. “Intentamos mejorar y potenciar el trato humano de los profesionales hacia los ciudadanos y entre los profesionales, y crear un comité de pacientes consultivo para marcar líneas estratégicas de desarrollo y acción en la gestión de la organización”, explica Julio Zarco.
Además, procura desplegar una escuela de salud que garantice la cultura de la salud de los ciudadanos con especial énfasis en la prevención, promoción y educación para la salud, e instaurar un estilo directivo transformacional en la gestión de los procesos, priorizando elementos de personalización en áreas críticas del hospital, como son UCI, pediatría, oncología, final de la vida, salud mental, urgencias, etc., y reorientar los espacios hospitalarios para facilitar el acceso y la participación de los ciudadanos en sus procesos y generar un clima amable, digno y humano.