Albert Borau ha explicado durante la presentación de la guía que la disreflexia es una reacción exagerada sobre el sistema de defensa, que se origina por la distención de las vísceras huecas, sobre todo la vejiga. En este sentido ha indicado que “los síntomas más leves son, por ejemplo, ponerse rojo, sudar o que el vello se ponga de punta”. El más grave, ha dicho, sería padecer una crisis hipertensiva, que puede desencadenar una hemorragia cerebral.
El documento, elaborado por diferentes profesionales de la entidad, responde a la necesidad de englobar bajo un mismo título toda la información existente sobre esta materia, con el fin de conseguir un documento de referencia que permita la consulta y actuación rápida y precisa para el personal sanitario, dado que la disreflexia es una situación de emergencia que precisa de un tratamiento eficaz e instantáneo. En la redacción han participado expertos de la FLM. Además, el trabajo cuenta con la colaboración de la Asociación Española de Urología y la Fundación ONCE.
Natacha León, directora médica de la FLM y coordinadora de este proyecto, ha subrayado que “este trabajo supone un avance en la materia, actualmente desconocida, para poder ofrecer una solución a un problema que tienen las personas con lesión medular sobre el que en la actualidad existen muchos artículos, pero ningún protocolo concreto a seguir”.
En palabras de Manuel Esteban Fuertes, presidente de la Asociación Española de Urología y Jefe de Urología del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, “esta guía supone un avance en asuntos que competen a las personas con una lesión medular, es un ejemplo para tratar temas de vital importancia en esta población, y sienta un eiemplo para elaborar proyectos y documentación de este tipo sobre otras complicaciones, como el intestino neurógeno”.