A lo largo de los próximos dos años, el Programa de promoción de la leche y los productos lácteos se van a poner en marcha una serie de actuaciones que persiguen alcanzar el objetivo principal de la campaña, “Di que sí a al menos 3 lácteos al día”, dentro de una vida activa y una dieta sana y equilibrada.
Recuperar unos productos indispensables
A pesar de ser uno de los alimentos esenciales en una dieta equilibrada, el consumo actual de leche y productos lácteos no alcanza las cantidades necesarias para una correcta alimentación.
Ante esta situación, Inlac y la Comisión Europea han unido sus esfuerzos para mejorar el conocimiento que tenemos de la leche y los productos lácteos, poniendo en marcha una campaña que apuesta por mejorar la percepción que los consumidores tienen de la leche y los productos lácteos, apoyándose en mensajes científicamente avalados y explicando que hay un lácteo adecuado para cada edad y cada persona.
Una de las vías con las que este programa busca la recuperación de un consumo adecuado de leche y productos lácteos es mediante el traslado a los consumidores de información contrastada sobre sus propiedades, siempre dentro de unos hábitos de vida saludables y acompañados de un incremento del ejercicio físico. Para ello, se ha formado un comité científico específico, integrado por expertos.
Este programa nace para servir de punto de encuentro informativo entre la leche y los productos lácteos y los consumidores. El trabajo y la experiencia de este Comité Científico es la base sobre la que se construye la comunicación, que se desarrolla en torno a tres áreas argumentales principales:
Propiedades de la leche y los productos lácteos por su contenido en:
- Proteínas
- Lípidos
- Hidratos de carbono
- Vitaminas
- Minerales (calcio, potasio, magnesio, zinc y fósforo)
Beneficios de la leche y los productos lácteos para colectivos que los necesitan especialmente:
- Deportistas, por la importancia de las vitaminas.
- Niños/adolescentes, por favorecer un buen crecimiento y desarrollo.
- Adultos, por su contribución a una alimentación equilibrada.
- Mujer, por sus beneficios en momentos clave como embarazo, lactancia y menopausia.
- Tercera edad, por su facilidad de consumo y masticación y aporte de proteínas de alto valor.
Recuperación de momentos de consumo tradicionalmente asociados a la leche y los productos lácteos:
- Desayuno, aporte de energía necesaria para el día.
- Deporte, una hidratación natural.
- Merienda, vuelta a la tradición y alternativa a la bollería industrial.