Además, se han incrementado las detecciones en niños y con discapacidades asociadas, de acuerdo con los datos recopilados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que ha difundido con motivo del Día Mundial contra la Lepra la asociación Fontilles, entidad española sin ánimo de lucro referente en la lucha contra la enfermedad. Ello incumple dos de los tres objetivos de la campaña Triple Cero de la Federación Internacional de Asociaciones contra la Lepra (ILEP, de la que la asociación es miembro): cero transmisión y cero discapacidad.
"Si la enfermedad sigue existiendo es debido a la pobreza, que facilita su transmisión, y al miedo al rechazo y al maquillaje de datos por parte de algunos gobiernos, que dificultan su atención temprana", lamenta B. Vijayakrishnan, representante de Fontilles en India. "A pesar de que las cifras recogidas por la OMS muestran un descenso en el número de nuevos casos detectados, la realidad es que la prevalencia de la lepra no se ha reducido en los últimos 10 años, lo que se ha reducido es la detección de casos y su búsqueda activa", considera.
Además, de acuerdo con el último informe del organismo de la ONU, referido a 136 países, la enfermedad ha avanzado de forma absoluta en dos regiones: un 7,5% en África, al pasar de 18.597 nuevos casos registrados a 20.004, y un 0,8% en el sudeste asiático, al pasar de 154.834 a 156.118. Catorce países concentran el 95% de las nuevas detecciones y tres de ellos, el 81%: India, con 127.326, el 60%; Brasil, con 26.395, el 13%; e Indonesia, con 17.202, el 8%.
Datos alarmantes: recaídas, niños, mujeres y discapacidad
Los indicadores más preocupantes son, sin embargo, los referidos al número de recaídas y al porcentaje de nuevos casos con discapacidades visibles, y en niños y mujeres. El informe evidencia que las recaídas han aumentado un 131,6% en solo un año, al pasar de 1.312 a 3.039, lo que supone el fallo en la vigilancia de la evolución del tratamiento por parte de algunos sistemas nacionales de salud. Por su parte, lejos de retroceder, los nuevos casos detectados en niños y niñas menores de catorce años suponen nueve de cada cien registros (18.796, el 8,9% del total, una décima superior a 2014), lo que indica la continuidad de la transmisión de la infección en las comunidades empobrecidas.
A su vez, sigue aumentando el porcentaje de personas afectadas que presentan discapacidades de grado 2 (visibles) en el momento de la detección (14.059, el 6,7% del total mundial, una décima más que en 2014). Se consolida así la tendencia que se viene detectando desde 2006, cuando la discapacidad visible afectaba a 12.392 personas. Al haberse disminuido ligeramente el número absoluto de nuevos casos, el crecimiento de la tasa de discapacidad, que asciende a 2,1 casos por millón de habitantes, evidencia que las detecciones son cada vez más tardías, frente al objetivo de rebajarla a un caso por millón establecido en la Estrategia Mundial contra la Lepra 2016-2010. La situación es especialmente preocupante en el sur y este de Asia. En India, por ejemplo, el porcentaje de discapacidades visibles en los nuevos casos ha pasado del 2,25% en 2006 al 4,6% en 2015.
Por último, las detecciones en mujeres suponen solo el 38,8% del total (81.860) pese a no tener un menor riesgo de contraer la enfermedad, lo que evidencia de nuevo una brecha de género en el acceso a los servicios de prevención, diagnóstico y tratamiento. Las mujeres y niñas tienen el doble de posibilidades de ser diagnosticadas de manera tardía y presentan un triple riesgo de padecer pobreza y exclusión, al ser discriminadas por motivo de género, de discapacidad y de estigma social. Siguen pareciendo invisibles y sus casos no se registran.
La lepra en Europa y España
La lepra es una enfermedad vinculada a la pobreza y a comunidades con graves deficiencias sanitarias por lo que, sin estar erradicada, no supone un problema de salud pública en los países europeos, que en 2015 solo comunicaron 18 nuevos casos a la OMS. En, 2015 se detectaron en España 8 nuevos casos (6 de ellos habían contraído la enfermedad en otros países) y había 34 personas en tratamiento.
En 2016, se notificaron al Registro Estatal de Lepra 11 nuevos casos (8 de ellos con país de origen distinto a España): 3 en Madrid, 2 en Andalucía y Cataluña, y 1 en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y País Vasco. Había 30 personas en tratamiento: 10 en Cataluña, 6 en Madrid, 4 en Andalucía, 3 en Castilla-La Mancha, 2 en Baleares y 1 en Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia y País Vasco.