El Servicio de Neonatología del Hospital Maternoinfantil Vall d’Hebron ofrece desde el mes de abril a las familias con pequeños ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos la posibilidad de participar en los talleres del Projecte Germans. Se trata de una iniciativa para acompañar y preparar a los hermanos de los recién nacidos ingresados en la UCI de Neonatología, que llega después de realizar un trabajo de investigación durante un año sobre el estrés que padecen los padres con niños hospitalizados y con más hijos a su cargo. Es un proyecto pionero en el Estado, en la línea de potenciar la humanización del hospital que se aplica en Vall d’Hebron.
El Projecte Germans es una iniciativa del personal del servicio, al detectar las dificultades y el estrés que generan a los pequeños y a sus familias el hecho que el hijo acabado de nacer esté ingresado en la UCI. Los recién nacidos pueden presentar una gran variedad de situaciones clínicas derivadas de su inmadurez y, a veces, patologías que hacen que necesiten cuidados especiales. En estas situaciones, a pesar de necesitar estar en incubadoras o conectados a diversas máquinas, continua siendo muy importante el contacto con su familia. Una situación angustiosa que se puede agravar en caso que haya hermanos mayores.
Los talleres permiten acercarse a esta realidad a través del juego. Las sesiones, que se hacen un día a la semana en la CiberAula del Hospital Maternoinfantil, permiten preparar a los hermanos para la visita. Guiados por una enfermera, pueden jugar a ser médicos y enfermeras y a cuidar a los recién nacidos. A través de este juego simbólico se preparan para conocer a su nuevo hermano que está en un lugar insólito, manipular los instrumentos que el recién nacido tiene conectados y entender porqué está ingresado en la UCI. La enfermera responsable del proyecto, Estrella Gargallo, destaca que utilizar la CiberAula, “un lugar amable y lúdico”, permite rebajar la tensión y, a la vez, que “los padres jueguen con el hermano mayor, favoreciendo su relación ya que últimamente no tienen tanto tiempo para jugar”. A la vez, “los talleres representan un espacio de acompañamiento emocional para las familias, que les ayuda a integrar este momento de la hospitalización de un hijo con el menor estrés posible”, apunta la psicóloga impulsora del proyecto, Maria Emilia Dip.
El proyecto no solo beneficia a los pequeños de la familia. Los padres y los abuelos también logran un beneficio. El jefe del Servicio de Neonatología, Fèlix Castillo, asegura que gracias a los talleres “se implican más en el cuidado de los neonatos y amplían su conocimiento sobre los cuidados que recibe su hijo” y “se les prepara para entrar en una unidad de alta complejidad”. Lo mismo defiende Estrella Gargallo, que apunta que “tienen un efecto indirecto sobre los padres y otros familiares, que también aprenden”. Para llevar a cabo el proyecto se ha contado con la colaboración de la Unidad de Atención al Ciudadano y Trabajo Social y los voluntarios del Hospital.
El Projecte Germans viene avalado por un estudio realizado entre los meses de abril y diciembre del año pasado. En este periodo, 82 familias y más de un centenar de hermanos pasaron por los talleres. Guiados por una enfermera y una psicóloga, se evaluó la efectividad y la reducción del estrés. Los resultados positivos animaron al servicio a añadir esta iniciativa a su actividad habitual.