El estudio se está llevando a cabo de forma colaborativa entre el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), la Unidad de Apoyo a la Investigación de Atención Primaria de Girona (del IDIAP Jordi Gol) y el Instituto de Investigación Biomédica de Girona (IDIBGI). Los primeros pacientes que participan desde el pasado mes de marzo, de entre 35 y 74 años, pertenecen al EAP Montilivi y está previsto que, próximamente, se incorporen los del EAP Celrà, lo que permitirá disponer de perfiles de población urbana y rural.
Maria Grau (IMIM) es la investigadora principal de este estudio, que durará dos años y que plantea una gestión del riesgo cardiovascular que hasta ahora sólo se hacía en la consulta de medicina de familia. El objetivo es ver si el grado de riesgo que se obtiene con este método innovador es el mismo que se consigue con el proceso habitual de tratamiento de datos.
Para llevar a cabo el estudio dos enfermeras reciben cada día los pacientes voluntarios que, a través de un dispositivo táctil similar a una tableta, responden a las preguntas que se les formulan. Los pacientes se toman la presión, se pesan y, con supervisión de las enfermeras, se hacen un análisis de sangre capilar. A través de un sistema Bluetooth esta información se incorpora al programa de gestión de este proyecto y, una vez procesada, el sistema produce recomendaciones preventivas adaptadas a las características de cada usuario.
Los responsables validan clínicamente los resultados que ofrece este dispositivo de autocribrado del riesgo cardiovascular, con el objetivo final de conocer si los consejos personalizados tienen un efecto positivo sobre el control de los factores de riesgo cardiovascular.