Enric Banda, director del Área de Ciencia y Medio Ambiente de la Fundación Bancaria ”la Caixa”; Vicens Oliver, presidente de la Fundación GAEM, y Daniel Benítez e Irati Zubizarreta, investigadores del ensayo clínico del IDIBAPS – Hospital Clínic de Barcelona, han explicado en Barcelona la nueva terapia antígeno específica, con células dendríticas para pacientes de esclerosis múltiple (EM) y de neuromielitis
óptica (NMO).
La Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) acaba de aprobar el ensayo clínico de esta terapia en humanos. La investigación sobre la terapia antígeno está dirigida por el Hospital Clínic de Barcelona e impulsada por la Fundación Grupo de Afectados de Esclerosis Múltiple (GAEM), y cuenta con el impulso de la Obra Social ”la Caixa”. Este tratamiento supone un gran avance para la comunidad científica y para los pacientes de EM y NMO, ya que constituye una técnica pionera a nivel mundial para obtener más eficacia y la minimización de los efectos secundarios.
Novedades de la terapia antígeno específica con células dendríticas
La investigación proviene de una decisión conjunta entre la Fundación GAEM y los investigadores del IDIBAPS – Hospital Clínic de Barcelona, liderados por Pablo Villoslada y Daniel Benítez. Esta tecnología ha sido desarrollada por el grupo de investigación de la Unidad de Digestivo del Hospital Clínic de Barcelona, dirigido por Julià Panés. Este mismo grupo realizó un ensayo clínico en 2011 con células dendríticas tolerizadas en pacientes con enfermedad de Crohn, obteniendo unos resultados significativos. Así pues, se aprovechó el mismo protocolo y la experiencia generada para adaptarlo a la EM y a la NMO, porque estas patologías y la enfermedad de Crohn tienen en común que son enfermedades autoinmunes. Aun así, en la enfermedad de Crohn la diana es desconocida, y en la EM y la NMO solo se conoce en parte, de forma que la tolerancia va mucho más dirigida.
La terapia antígeno específica con células dendríticas representa un gran progreso en la investigación de la EM y la NMO, y tiene como objetivo modular las defensas de los pacientes de una forma muy específica y selectiva, para frenar la inflamación que causan las dos patologías, sin alterar el resto de defensas. Este tratamiento consiste en aislar y madurar en el laboratorio (sala blanca) un tipo de glóbulos blancos de la sangre, las células dendríticas, y enfrentarlas a porciones de proteínas de la mielina y de los astrocitos contra los que el sistema inmune de los pacientes reacciona de forma patológica.
La maduración de estas células las dirige a suprimir la respuesta inflamatoria, en vez de promoverla. Y lo hace de una forma específica solo para estas dianas, las proteínas del cerebro. De este modo, se frena la respuesta inflamatoria de cada paciente contra las proteínas cerebrales, sin afectar a otras respuestas del sistema inmune necesarias para defenderse de las infecciones comunes o del cáncer. Al emplear células del mismo paciente y distintas porciones de proteínas del cerebro, se conseguirá un tratamiento personalizado, más eficaz y sin efectos secundarios.
Además, las características que se esperan de este tratamiento se fundamentan en el modelo animal, denominado encefalitis autoinmune experimental, en el que ya se han obtenido resultados positivos para el tratamiento de la EM y la NMO.
Doce pacientes con EM o NMO participarán en el ensayo clínico, y entre los criterios para ser incluidos en la prueba destacan los siguientes: edad comprendida entre 18 y 65 años, duración de la enfermedad superior a un año y grado de discapacidad entre 3,0-8,5 de la escala ampliada de estado de discapacidad (EDS, del inglés Expanded Disability Status Scale). Asimismo, algunos de los criterios para quedar excluidos de la prueba son: haber recibido tratamiento con corticoides o haber tenido un brote de la enfermedad durante el último mes; sufrir alguna enfermedad sistémica grave o tener antecedentes personales de cáncer; mujeres en edad fértil que no utilizan métodos anticonceptivos eficaces, embarazadas o lactantes.
Aplicación de la terapia en otras patologías
Este mismo mes de julio se iniciará el ensayo clínico con 12 pacientes de EM y NMO para demostrar la eficacia y la seguridad de la terapia. Los investigadores prevén finalizar la investigación a finales de 2015. En el caso de que se cumplan todas las expectativas, será necesario realizar nuevos ensayos en el ámbito europeo, y se espera que a mediados de 2018 pueda ser aplicada en pacientes con EM y NMO.
El desarrollo de esta investigación no solo supone un gran avance para estas patologías, sino que se espera obtener resultados significativos de la terapia en humanos para aplicarla en otras enfermedades autoinmunes y reumatológicas, como las encefalitis autoinmunes, la artritis reumatoide, la psoriasis, etc.