Esta base de datos del CIBERES, en la que participan actualmente 7 centros hospitalarios, está ya construida y lista para comenzar a incorporar datos de los pacientes. Se incluirán datos demográficos, clínicos, de control de la enfermedad, de uso de medicación o de antecedentes familiares, además de los resultados de las pruebas analíticas realizadas a los afectados. "A lo largo del próximo año, tenemos previsto recoger datos de 100 pacientes, y seguiremos incorporando más información durante al menos los 4 años que dure el estudio, aunque nuestra intención es que los afectados y por lo tanto la evolución de su enfermedad, se puedan seguir estudiando durante más tiempo", explica Victoria del Pozo, coordinadora del Programa Corporativo de Asma del CIBERES e investigadora en el Instituto de Investigación Sanitaria-Fundación Jiménez Díaz.
Gracias a la colaboración de los 7 grupos de diversos hospitales, se podrán optimizar recursos, y reducir así el tiempo que se tarda en trasladar los resultados a la práctica asistencial. "Así, en última instancia, se mejorará la salud de los pacientes asmáticos, y se aumentará su calidad de vida y su bienestar", concreta Victoria del Pozo.